Como cada otoño, toca paseo por el monte a recoger castañas 
La verdad que me encantan, cocidas, asadas y de cualquier manera. Es uno de los frutos que mas me gustan. El sabor, la textura y también ir a recogerlas.
Esta receta la suelo utilizar en momentos de alto desgaste para recuperarme o si se que voy a tener una semana llena de actividades la tomo antes.
La aprendí de un amigo que estuvo un tiempo cocinando junto a un cocinero japonés y la verdad que desde entonces, es un clásico en mi cocina cada otoño
Ingredientes:
-Arroz integral 75%
-Arroz dulce o glutinoso 25%
-Castañas al gusto. Os recomiendo que sean frescas pero si no encuentras, te puedes servir secas o en copos
-Calabaza potimarron u otra variedad
-Sal, tomillo y shoyu
Elaboración:
Para conseguir que el arroz quede bien cremosos, te recomiendo que lo dejes a remojo de la noche anterior. Puedes mezclar las dos variedades de arroz en el mismo recipiente.
Al día siguiente, lo lavas bien con ayuda de un colador y en una olla, lo cocinas con 2,5 ud de agua por 1 de arroz y una pizca de sal.
Mientras, en una cazuela con abundante agua, escaldas las castañas durante 2-3 minutos y las dejas escurrir. Pélalas con cuidado y cuando el arroz ya lleva 20 minutos cocinando las añades a la cazuela para que se cocinen juntos.
Picas la calabaza en cuadraditos y la añadela también a la cocción y dejala que se cocine hasta que el arroz esté en su punto y quede un poco caldoso. Verás que el arroz dulce le da una textura muy cremosa, estilo risotto.
A mi me gusta añadirle un poco de tomillo para que este mas aromático y un poco de shoyu antes de finalizar la cocción o también con unas hojas verdes eslcaldadas.
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