martes, 24 de enero de 2017

Por qué la macrobiótica no habla de adelgazar



En las escuelas de macrobiótica apenas se habla de la pérdida de peso.
¿Por qué?
Quizás porque la gente interesada en macrobiótica no suele tener sobrepeso, suelen ser “hippies” delgados, el tipo de personas que se interesan por las cosas alternativas. Las personas con sobrepeso suelen ser más relajadas, conformes con lo que les rodea (ver: La personalidad del macrobiótico estricto).
Quizás porque la pérdida de peso se vea como un objetivo secundario, banal, una forma de venderse a la moda o a la imagen, cuando lo que importa es la salud… Es común oir que la macrobiótica se centra en la salud y “si el cuerpo necesita perder peso, lo perderá”.
Quizás porque no es el tema estrella en la medicina china, donde se habla de las energías yin-yang, de los cinco elementos… La pérdida de peso en ese contexto parece algo demasiado terrenal.
Sea por la razón que sea, los consultores macrobióticos nos vemos obligados a profundizar por nuestra cuenta en el tema de adelgazar, y para ello, a mi me gusta recurrir a libros como los de L. Jimenez, Juan Revenga o Julio Basulto.
Estos autores se centran en la dimensión nutricional (carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas, calorías, etc.), y prescinden del aura oriental de la macrobiótica, pero al final los alimentos que recomiendan no difieren, o no deberían hacerlo, de los que recomienda la macrobiótica.
Os muestro algunos ejemplos:
En libro Lo que dice la ciencia para adelgazar de forma fácil y saludable, L. Jiménez resumen todo lo expuesto en cinco reglas básicas:
  • Evitar carbohidratos refinados y alimentos altamente procesados
  • Muchas verduras, vegetales y fruta
  • Cantidad suficiente de proteínas
  • Añadir frecuentemente grasas, mejor las más saludables
  • La dieta no es una penitencia
Del libro Adelgázame, miénteme, de Juan Revenga, me ha parecido suficiente citar varios puntos del índice:
  • Come más vegetales
  • Come menos alimentos superfluos
  • Come menos alimentos procesados o con medallas
  • Usa la cocina
  • Compra en mercados
  • Planifica tu alimentación
  • Come en la mesa
  • No cuentes calorías
En el libro Secretos de la gente sana, Julio Basulto y María José Mateo citan y defienden las tres reglas básicas del conocido autor Michael Pollan:
  • Coma comida. Se refiere a comida real, evitando alimentos muy procesados o con mucha carga química. Muchos de estos alimentos tienen grasa no saludable, harinas blancas e ingentes cantidades de azúcar.
  • No demasiada
  • Sobre todo vegetales
Lo interesante de la macrobiótica es que te aporta una dimensión extra, no solo la nutricional (de la que a veces adolece y hemos de buscar formación complementaria en otras escuelas o universidades), sino el estado de tu condición, tu constitución, el efecto de determinados alimentos que a la nutrición le pasan desapercibidos, los alimentos que calientan/enfrían o los que secan/dan humedad, o los alimentos que van bien para un órgano determinado… elementos que, aunque no estén presentes en el paragdigma médico de occidente, sí que lo están en el paradigma médico oriental, utilizado con éxito durante siglos.
Aunque el lenguaje utilizado por la macrobiótica sea distinto al de la nutrición oficial, ya que ambos profesionales han recibido entrenamiento distinto, las recomendaciones últimas no deberían de ser muy diferentes si las cosas se están haciendo bien (ver el post: Macrobiótica vs Nutrición, o el efecto MasterChef).
Por todo ello, me he propuesto crear el modelo macrobiótico para adelgazar, estableciendo así diferencias con el modelo de la macrobiótica estándar de Michio Kushi, del que podéis ver una pequeña explicación en el vídeo de abajo (Pincha aquí si no puedes verlo: Dieta Macrobiótica estándar).
Aveline Kushi’s – Dieta Macrobiótica Estándar from Macrobiótica Mediterránea on Vimeo.
La próxima semana presentaré el modelo macrobiótico para adelgazar. Mientras tanto, si tienes alguna experiencia interesante que relacione la macrobiótica con la pérdida de peso, me encantaría que la compartieses con nosotros, seguro que sería de ayuda para otros lectores.

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